Los hombres ignoran el mucho amor que pueden conseguir con una lágrima...
lunes, agosto 29, 2005
Rayos de sol
En una tarde soleada estuve caminando por un bosque y me detení en un lugar donde los árboles hacian huecos para los rayos de sol. Hace mucho que no veia algo parecido. Los árboles se movian con el ligero viento y los rayos cambiaban de lugar. Me acordé de una canción que escuchaba cuando era chiquita.
La canción cuenta una triste historia de un duende de bosque que se enamora de una linda sílfide de sol. El duende solo vive de noche y la sílfide solo vive en la luz. Su encuentro es corto, el duende acaba de levantarse y la sílfide ya se está yendo con sus hermanas a la luz. El duende le pide que se quede viviendo en el bosque con el, pero la sílfide le dice que en la oscuridad se muere. Pues la sílfide se va, y el duende se queda extrañando por qué tiene que ser así, por qué algunos tienen que vivir en la oscuridad mientras otros son hijos del sol...
viernes, agosto 26, 2005
Bellezas
Yo siempre ando buscando bellezas, o mejor dicho cosas estéticas (ya que la estética es algo tan subjetivo) en la naturaleza, o donde sea. Me encanta quedarme viendo paisajes, o encontrar algo bonito hasta en un vertedero. Quisiera siempre tener una cámara en la mano, por si acaso encuentro algo que quisiera capturar para siempre.
Me gustan los contrastes fuertes y colores muy saturados, y por eso, hasta las cosas más simples o más raras me pueden parecer encantadoras.
Aqui están unos ejemplos de cosas que encontré en el patio de mi casa y las fotografié, como una flor de calabaza llena de pequeñas moscas. Mi mamá lo único que me dijo fue; "y esas moscas tan feas??" y para mí fue lo más lindo que vi.
Me gustan los contrastes fuertes y colores muy saturados, y por eso, hasta las cosas más simples o más raras me pueden parecer encantadoras.
Aqui están unos ejemplos de cosas que encontré en el patio de mi casa y las fotografié, como una flor de calabaza llena de pequeñas moscas. Mi mamá lo único que me dijo fue; "y esas moscas tan feas??" y para mí fue lo más lindo que vi.
jueves, agosto 25, 2005
Respirando Santo Domingo
Desde que uno viaja, se da cuenta de que cada país tiene su propio olor. El país en general tiene su olor, pero también las ciudades y el campo.
Cuando estoy en RD y camino por las calles, solo trato de tener en la mente el olor de los inviernos frescos en los campos de Finlandia, para no darme cuenta cuando inhalo el olor podrido de los basureros de la ciudad. Aparte de esto, siempre he preferido el olor de la capital de Finlandia, Helsinki, comparado con el olor húmedo y contaminado de Santo Domingo (y no estoy diciendo que Helsinki no tenga contaminación, pero por lo menos no hace tanto calor), pero hoy, al abrir mi maleta, mi nariz se lleno del olor de Santo Domingo, y me sentí tan bien. Cerré los ojos, respiré profundo y pensé en casa. Ya, hasta en los olores, Santo Domingo es mi casa, sin importar sus defectos.
Cuando estoy en RD y camino por las calles, solo trato de tener en la mente el olor de los inviernos frescos en los campos de Finlandia, para no darme cuenta cuando inhalo el olor podrido de los basureros de la ciudad. Aparte de esto, siempre he preferido el olor de la capital de Finlandia, Helsinki, comparado con el olor húmedo y contaminado de Santo Domingo (y no estoy diciendo que Helsinki no tenga contaminación, pero por lo menos no hace tanto calor), pero hoy, al abrir mi maleta, mi nariz se lleno del olor de Santo Domingo, y me sentí tan bien. Cerré los ojos, respiré profundo y pensé en casa. Ya, hasta en los olores, Santo Domingo es mi casa, sin importar sus defectos.
En la bahía
El fin de semana pasado mis padres y yo pasamos un dia maravilloso cerca del Mar del Norte. Me encanta el olor y el ambiente de este mar. El agua no refleja colores increibles ni tiene agua tibia como el Mar Caribe, pero tiene su propio encanto. Intenté capturarlo con estas fotos, en una de las bahías de este mar poco salado.
Después de muchos años sin práctica, decidí intentar remar fuera de la bahía, hasta el mar abierto, pero no llegué hasta allá, sino que decidí pasarle los remos a mi padre y quedarme contemplando el ambiente desde la proa.
Después dimos una caminata por unos senderos atraves de los campos y el bosque, y llegué cansada de vuelta al muelle de la casa de campo.
Más tarde prendimos leña y preparamos par de salchicas en el fuego, como se suele hacer aquí en verano.
También fuimos al sauna y nos tiramos en el agua. Para mi el agua estuvo super fría, pero mi padre estuvo gozando saltando al agua como un muchachito.
Después de muchos años sin práctica, decidí intentar remar fuera de la bahía, hasta el mar abierto, pero no llegué hasta allá, sino que decidí pasarle los remos a mi padre y quedarme contemplando el ambiente desde la proa.
Después dimos una caminata por unos senderos atraves de los campos y el bosque, y llegué cansada de vuelta al muelle de la casa de campo.
Más tarde prendimos leña y preparamos par de salchicas en el fuego, como se suele hacer aquí en verano.
También fuimos al sauna y nos tiramos en el agua. Para mi el agua estuvo super fría, pero mi padre estuvo gozando saltando al agua como un muchachito.
jueves, agosto 18, 2005
Sweet home Harjavalta
Aqui estoy, en mi pueblo natal, Harjavalta, una "ciudad" de 8 mil habitantes, a 30 kilometros de la costa suroeste de Finlandia.
El título dice, sweet home Harjavalta, pero deberias notar el tono sarcástico en la expresión. Yo nunca he sido muy amiga de mi pueblo, ni de su gente, pero después de todo, aqui fue que nací y crecí hasta los 16 años. Me siento en casa, conozco la gente, y creo que ya superé mi disgusto con la vida de este pueblo. Ahora lo miro todo "desde arriba", ya no soy de aqui, solo vengo de aqui y estoy de visita.
Hoy fue un dia bastante bonito, la temperatura estaba en 25 grados, y decidi dar un paseito por el pueblo. Fui al cementerio (aqui los cementerios son como jardines, nada parecido a los de Santo Domingo) y después a la "playa" al lado del río que traviesa la ciudad. El silencio y la tranquilidad aqui es increible. Solo eran las ocho de la noche, y no vi a casi nadie en el camino.
Después de todo, es un pueblo bonito.
El título dice, sweet home Harjavalta, pero deberias notar el tono sarcástico en la expresión. Yo nunca he sido muy amiga de mi pueblo, ni de su gente, pero después de todo, aqui fue que nací y crecí hasta los 16 años. Me siento en casa, conozco la gente, y creo que ya superé mi disgusto con la vida de este pueblo. Ahora lo miro todo "desde arriba", ya no soy de aqui, solo vengo de aqui y estoy de visita.
Hoy fue un dia bastante bonito, la temperatura estaba en 25 grados, y decidi dar un paseito por el pueblo. Fui al cementerio (aqui los cementerios son como jardines, nada parecido a los de Santo Domingo) y después a la "playa" al lado del río que traviesa la ciudad. El silencio y la tranquilidad aqui es increible. Solo eran las ocho de la noche, y no vi a casi nadie en el camino.
Después de todo, es un pueblo bonito.
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